Sobre aplicar un recorte del 10 % en los salarios de los españoles que aún
cobran algo a fin de mes. Sobre eso quiero escribir. Pero para aplicarme en el
menester antes debería decir algo de los millonarios sujetos del FMI que han
excretado tan gloriosa idea, y también valorar como se merecen a los
impresentables de esa cosa deforme que se llama Comisión Europea ,a esos incontinentes mentales que alcanzan el
orgasmo sólo con imaginarse la ejecución de tal medida. A ver qué se me ocurre
sin meterme en un lío…
Y es que veréis, no me apetece mucho perder la educación y las
formas ciscándome en todos y cada uno de ellos, en sus respectivas parentelas y
en su plato de comida. Así que quizás mejor me muerdo la lengua y le atizo un
martillazo al teclado del ordenador, no sea que tales descerebrados
malinterpreten mis palabras, que no es esa mi intención, de veras…Voy a ser
exquisito.
Si les llamo golfos, vividores, parásitos de
un sistema que les paga una fortuna por acabar con la vida ajena, se me pueden
ofender los unos y los otros. Si les llamo desalmados, negreros y explotadores
creo que me quedo corto. Si les llamo desgraciados, viles y canallas
especuladores, verdugos y ejecutores al servicio de la dictadura financiera,
voy rondando la verdad pero sin acertar del todo. Y si les llamo de la forma
que en el fondo se me antoja no sería justo porque en algunos casos las madres
no tienen la culpa del proceder de los señores feudales que han parido.
Entonces, mejor no definiré a los del FMI y a
nuestros entrañables amigos de la Comisión Europea, correré un estupidísimo
velo y me centraré en el tema del 10 %. Para ahí que voy, sin red. De entrada,
que no hay que ser de ciencias para comprenderlo, el 10 % de poco transforma
ese poco en nada. Y el 10 % de nada sigue siendo nada. Por otro lado y que yo
sepa, la época de las plantaciones y los buanas
quedó atrás, aunque éstos se esmeren tanto y tanto en recuperarla. En
consecuencia y salvo que la gilipollez del 10 % se refiera a que nos amputemos
las partes pudendas, una mano o les donemos los riñones, que me cuenten los
imbéciles de dónde, que yo no tengo ni tiempo que perder en tonterías ni ganas
de continuar soportando el uso desmedido del abuso. Y es que hay que ser un
mierda de enciclopedia para plantear semejante barbaridad.
Concluyendo. Para estar fastidiados (iba a
escribir jodidos pero me he arrepentido) en un sitio en el que nos maltratan, nos
insultan, nos vejan, nos golpean y no nos quieren, casi mejor marcharse a la
francesa, sin despedirse. Eso sí, en esta retirada lo suyo es llevarse por
delante todo lo que se mueva, que como España diga adiós a esta payasada de la
Unión Europea, a la Angelita no le alcanza el sueldo para antidiarreicos.
Euroescéptico que es uno. Viva África.
En cuanto habro el ordenador, pienso: haber con que nos sale hoy Tomás.
ResponderEliminary el día que no encuentro nada, entiendo lo que le pasa al fumador sin tabaco. Y es que tus publicaciones se hacen indispensables, y se sienten como propias, para tranquilizar la rabia y la frustración que nos producen los políticos en general. También hay que decir, que en la Fallas de Valencia, cada año salvan una, así también hay que salvar uno de vez en cuando. Un fuerte abrazo Raquel
Raquel, muchas gracias por estar ahí. Es un consuelo saber que hay alguien que siente lo que uno siente. Un consuelo y un inmenso placer. Un saludo de verdad, amiga.
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