La escuela del PSOE

Coherencia ante todo, que no se diga. Como ya sabréis el PSOE ha emitido un vídeo sobre la educación privada. En él, un trajeado niño repelente va de la mano de su asistenta al colegio y le pregunta a ésta si tiene hijos. Ante la respuesta de la mucama el niño contesta que le parece muy bien, que así los hijos de ella podrán ser a su vez los cuidadores de los que él tenga. De esto se pretende que deduzcamos que los que estudian o han estudiado en colegios privados y/o concertados son la clase dominante, aquéllos que esclavizan y esclavizarán a los que vienen de la pública. Negreros y mandingas. Ricos y pobres. El triunfo incontestable de los privilegiados sobre los desheredados de la tierra. Y en el PSOE no lo pueden consentir, que son muy de izquierdas ellos, y por eso convocan a la ciudadanía a la lucha.
Lo que ocurre es que, fíjate tú, rascas un poco y salen capas y capas de maquillaje del malo. Por poner algún ejemplo. Rubalcaba estudió en el exclusivo Colegio Nuestra Señora del Pilar, Zapatero en las Discípulas de Jesús y en el Colegio Leonés, privados ambos, Bono en los jesuitas, Carme Chacón en el Divina Pastora, Ángel Gabilondo en el Sagrado Corazón, Cristina Garmendia en un privado francés, Bibiana Aído en el Beaterio de Jesús, María y José, y así hasta decir basta. Claro está que en ellos no pudieron elegir, fueron sus padres los que intentaron transformarles en malvados pijos esclavistas. Menos mal que ya adultos optaron por el socialismo como guía de vida y expulsaron de su cuerpo al maligno. O no.
Porque resulta que, lo que son las cosas, estos grandes defensores de la enseñanza pública prefieren que sus vástagos se engominen y, de igual manera que el futuro explotador de su vídeo, sean los que porten el látigo mientras otros acarrean con el algodón. Con ese objetivo las hijas de Zapatero estudiaron en el colegio privado de San Miguel, de Las Rozas, una de las de Bono en el colegio Nuestra Señora de los Infantes, los hijos de la ministra Cristina Garmendia en el colegio San Patricio de La Moraleja, los de Pepe Blanco en el Instituto Británico de Madrid, a cuarenta mil duros al mes, los de Moratinos en el Liceo Francés, o los de Montilla en el Colegio Alemán de Barcelona (donde el catalán es el tercer idioma). Y otra vez hasta decir basta.
Conclusión fácil. En busca del voto se manipula, se miente y se engaña lo que se puede y más. Sin rubor ni vergüenza, estos socialistas de bote, estos salvapatrias establecidos sobre el fraude y la mentira, sacarán todos los perros a pasear con tal de culminar su timo en las urnas. Tú, vótame que viene la derechona, te quitará los médicos y tus hijos no podrán ir a la escuela. Confía en nosotros si quieres que todos seamos iguales y tengamos las mismas oportunidades. Pues bueno, esto es lo que hay. Me descomponen el cuerpo.