Cándido Méndez y Fernández Toxo negocian y negocian, agotaditos están los pobres. El acuerdo está a la vuelta de la esquina, la salvación se acerca lenta pero segura. El jefe de las cosas suspende una cumbre vital de los socialistas europeos y acude raudo a la llamada de la jungla. La cita con los agentes sociales no admite demora, el país depende de sus dotes interplanetarias como negociador. Sorprendidos por su decisión de suspender su asistencia a la fiesta noruega, prensa y comunes preguntan al nuevo Séneca. Y Zapatero, sombrío y preocupado, con el gesto serio de un gran estadista, declara a los cuatro vientos que la reunión con sus colegas de sillón es ineludible e inaplazable, no admite espera, él debe estar allí para arreglar España. ¡Qué sería de nosotros sin su presencia! No quiero ni pensarlo…
Bueno, bueno. Ya se ha dejado cazar en otra mentira. Mire usted, si me permite que se lo diga, no se complique tanto, hombre. ¿Qué no le apetece irse de parranda a Noruega con la que está cayendo? Pues diga que no y ya está, pero no se invente las cosas. Las mentiras no tienen patas, no salen corriendo, se quedan ahí donde se sueltan esperando que alguien las descubra. Y ahora el dos en uno sindical se ha tropezado con la última y le tapa la boca, dejándole en evidencia una vez más. Vamos, que le dicen que ni sobrevenida, ni ineludible, ni inaplazable ni “ná” de “ná”. Qué usted sabrá por qué no se ha ido de crucero a los fiordos, qué por ellos no es. Resumiendo, qué ni falta hacía que parase por aquí, qué para lo que puede o va a hacer, como si se recluye en un monasterio…¡Ay, no!, se me olvidaban las municipales y lo que le gusta lucir palmito, como para perderse algún mitin donde la degeneración mental y la manipulación se transforman en aplausos.
¡Qué largo se me está haciendo el adiós! Ni con agua caliente se va. Uno ya no sabe qué creer, a ver si será verdad la profecía de Nostradamus, aquella que decía "De tierras con nombre de animal, vendrá quien gobierne a los iberos, adorará a reyes negros y abrazará religiones extrañas. Llenará su palacio de bufones y aduladores y usando su propia máscara de bufón, traerá consigo el hambre, la pobreza y la desesperación..."
¿Zapatero es de León o de Valladolid? No sé, no sé…
No hay comentarios:
Publicar un comentario