miércoles, 24 de agosto de 2011

Interpretar las frases, por favor.

Elena Salgado, ha asegurado este miércoles que la propuesta de limitar el déficit en la Constitución es una decisión "autónoma", que al Gobierno "no le ha obligado a nadie", y que está orientada a serenar los mercados y proporcionar tranquilidad a los inversores. La vicepresidente para Asuntos Económicos, tras celebrar que el PP haya aceptado el envite, ha indicado que España no está obligada por Alemania y Francia a hacer algo así (voy yo y me lo creo) y ha recordado que Alemania ya lo hizo y que Francia e Italia también lo van a hacer. Luego, ha destacado, en una frase para la historia (con minúsculas) que "los grandes países de la UE debemos estar en la vanguardia de la estabilidad presupuestaria". Ole, ole y ole. Y no tiene abuela, aunque sí maestro en esto de las sentencias prodigiosas.
Y si no, atención al catedrático. El martes, a Zapatero le traicionó el subconsciente, más consciente que el consciente, y terminó su participación en el Congreso haciendo una confesión en la que resumía para qué sirven los componentes de esta casta política que nos gobierna. Con esa carita de cervatillo sicópata que tiene, que dan ganas de comérselo a dentelladas, pronunció una frase fantástica digna de ser bordada con hilo de oro en la ropa interior de todos los españoles que se precien de serlo. “Todos sabemos que esto (la reforma constitucional) no va a arreglar el desempleo ni la crisis, pero es un buen camino. Hagámoslo con naturalidad”.
Como escribo para esto, para interpretar lo que me dicen los que mandan, aquí reflejo lo que, mejor o peor, que tengo mis limitaciones, entiendo. Hubiera quedado más real, y por lo tanto, más digno; “Mirad, colegas. O hacemos algo que quede bien, o nos van a dar de leches por todos los lados. Los franceses y los alemanes están hasta el moño de mantenernos; dicen que ya está bien de que vivamos del cuento sin dar un palo al agua, que no nos van a subvencionar más y que, o espabilamos, o intervienen el país. Y, por otro lado, como los españoles no creo yo que continúen soportando que les sigamos tomando el pelo, antes de que nos cuelguen de las farolas, vamos a proponer un recorte en el negocio que tenemos montado. Total, no pasa nada, aún nos queda hasta el 2018 para construirnos el chalé. Les damos pan y les decimos tontos, y si cuela, cuela. Eso sí, con naturalidad. Que no se nos note el descojone, que la liamos parda”.
Efectivos no son, pero para echar unas risas sí que sirven. Embaucadores y mentirosos son los padres de nuestra pobre patria. Peste de casta.

1 comentario:

  1. Mi libertad estara mas contenta, si cuando estos terminen el 20N, hagamos una acusacion popular para pedirle a este cervatillo y todos sus ministrillos, todos los que han pasado por la Moncloa, que rindan cuentas y den explicaciones de donde se han gastado o guardado el dinero, exigirle daños y perjuicios causados a pensionistas, funcionarios y que devuelvan todo el dinero que han dado a ONG's amigas cobrandeselo de por vida de sus suledos que dejarian de percibir. Creo que es la mas justo para este pais.

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